Seceda
Poblaciones
La parroquia de San Silvestre de Seceda se halla entre 760 y 790 m. de altura, su iglesia del siglo XVIII, situada en un altozano está dedicada a San Silvestre. Declarada Aldea Típica y Conjunto Etnográfico de Interés Turístico por la Xunta de Galicia.
San Silvestre de Seceda, en tiempos una de las parroquias más importantes de O Courel, cuando los carros cargados con mineral pasaban por aquí hacia la ferrería de A Lousadela a orillas del río Lóuzara. El aislamiento que padeció durante mucho tiempo, apartada de las principales vías de comunicación, contribuyó en gran medida a su despoblación, pero al mismo tiempo ha permitido que hoy en día sea una de las localidades mejor conservadas de la zona. Debido a la fuerte emigración, en determinado momento dejaron de construirse viviendas nuevas y la población presenta actualmente casi el mismo aspecto que tenía en la primera mitad del siglo. Hace pocos años, Seceda fue sometida a un plan de restauración integral con el fin de salvaguardar su valioso patrimonio de arquitectura popular. La población presenta una característica fisionomía de casas apiñadas y calles estrechas para protegerse mejor de las nevadas y el frío invernal. Los documentos más antiguos que se conocen, que proceden de la iglesia local y datan de comienzos del siglo XVIII, señalan que en aquella época la población contaba con cerca de cien casas habitadas y un total de unos quinientos vecinos. Muchas casas tienen voladizos y salientes pronunciados, y algunas de ellas están unidas entre sí por pasadizos, de forma que ciertas calles casi parecen corredores o pasillos en los que los vecinos podían desarrollar sus tareas cotidianas en unas condiciones más o menos semejantes a las del interior de un edificio.
Seceda conserva un aspecto medieval, fue restaurada a principios del siglo XXI y todas sus calles están empedradas. Los trabajos de restauración han restituido a todas las calles sus típicas calzadas de chapa cuña, hechas de losas de pizarra sólidamente clavadas en el suelo para que las avenidas de agua no deterioren el firme empinado. Al mismo tiempo se construyó una red de alcantarillado y se instaló una iluminación que resalta los valores estéticos de la arquitectura local. Es interesante la fuente que está antes de llegar a la iglesia. La Casa da Torre siempre tuvo escudo y una de sus habitaciones se llamó Sala da Audiencia. En la Casa da Mandela hay una puerta en arco realizada en losas de pizarra colocadas verticalmente como la puerta de la casa de Torre de Marcos en Meiraos. El castro está situado a unos 25 minutos andando en dirección a Cortes y se pueden ver sus muros al final del souto. La iglesia conserva imágenes de San Silvestre, San Brais y Santiago Peregrino en recuerdo del Camino, fué construida sobre otra más antigua.
Tomando la carretera en dirección a Sobredo a 1 km. está la cascada de Ponte da Pedra. En la parroquia hubo cinco molinos. A Seceda bajan el "regueiro" do Fial en el que hay una pequeña cascada, y el "regueiro" de Porredo. Estos molinos dejaban de funcionar en los meses de mayor rigor estival, cuando el caudal del arroyo de Seceda bajaba de nive y no era suficiente para mover el rodicio. Debido a este inconveniente, los vecinos de Seceda tenían que desplazarse con el grano a los molinos de Lousadela y de Santalla de Abaixo, ambos en el río Lóuzara. Actualmente solo tres se conservan en un estado aceptable, el cuarto se encuentra en ruinas, y llevan sin funcionar más de 25 años.
ALOJAMIENTOS:
- Casa da Teixeira, Seceda (O Courel): 661254622
- Lar da Cima, Aloxamentos Turísticos, Seceda (O Courel): 677838956
- A Casa do Caurel, Cortes (O Courel): 982400825
- Lar da Cima, Aloxamentos Turísticos, Seceda (O Courel): 677838956
- A Casa do Caurel, Cortes (O Courel): 982400825
Seceda pertenece al municipio de Fogoso do Courel y es una de las aldeas paleozoicas del Geoparque Terras do Courel. En este caso, la roca usada para construir las casas es caliza devónica, con unos 400 millones de antigüedad. Hay que fijarse mucho para descubrir fósiles marinos en las antiguas rocas que se usaron para construir las casas. También es una de las aldeas más bonitas y una de las que mejor se han restaurado, aunque principalmente como segundas residencias o alojamientos turísticos.